Nos animamos a hacerla porque nos parecía que la mesa de la habitación de la pequeña quedaba un poco "sosa".
Necesitas:
- Una mesa blanca
- Una taladradora en forma de círculo
- Papel adhesivo morado y rosa
Con la taladrora haces círculos y los vas pegando como más te guste a la mesa. Como véis es algo que con un poco de ayuda pueden hacer los niños, incluso más pequeños.
Como véis las posibilidades son infinitas porque este papel adhesivo lo tienes en multitud de colores, también puedes utilizar los gomets que ya vienen en colores de distintas formas y que venden en muchas librerías.
Para que los niños se involucren más en el proceso, puedes dejarles que sean ellos mismos los que escojan los colores y dónde colocar los círculos. Adriana lo tenía clarísimo: morado y rosa.
Una ventaja de este papel es que como es plástico puedes lavar por encima y no estropea lo que siempre resulta muy práctico en una mesa infantil que seguramente llevará mucho "trote"
Y así de bonita quedó colocada ya en la habitación
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