MERMELADA DE FRESAS

Como ya está terminando la temporada de las fresas y tienen un precio razonable es un momento excelente para hacer mermelada de esta deliciosa fruta. A las niñas, sobre todo a Adriana, le resultó muy curioso que algo que puede comprar en un bote en el supermercado se puede hacer fácilmente en casa y mucho más rico.

Alba ya había descubierto esto hace tiempo y es un clásico de ella ir por el supermercado y decir: esto no lo compramos que lo hacemos mucho mejor en casa :) :)

 La ventaja de comprar las fresas en cajas, además del precio, es que para una familia diogenera como nosotros puedes decorarlas y aprovecharlas para un montón de cosas- ya os iremos enseñando-.

Es una receta que resulta muy fácil para los niños siempre y cuando estén bajo vigilancia a la hora de trabajar en la cocina, sobre todo porque hay que dejar la fruta hervir y puede saltar hacia afuera. 

Para aproximadamente dos botes de 250 ml de mermelada necesitas:

• 1 kilo de fresas pesadas después de quitarle el rabito.
• 200 gr. de azúcar- a nosotros nos gusta muy poco dulce-
• Un sobre de azúcar vainillado o 1 ramita de canela
• Zumo de un limón.

Limpiamos y cortamos las fresas en trocitos muy pequeños, si lo hacemos así no es necesario pasar la mezcla por la batidora.

 Las ponemos en una olla junto al azúcar y la canela

Lo ponemos a fuego medio y le añadimos el zumo de un limón

Removemos siempre con cuchara de madera, es el material que menos conduce el calor con lo que es muy apto para cocinar con niños porque el riesgo de quemarse es menor que con otro tipo de cucharas.

Cuanto más tiempo de cocción más de desharán las fresas, cogerá una textura más espesa y su sabor se intensificará. Hay gente que no le añade azúcar porque prefiere mantener las fresas mucho más tiempo al fuego, es otra opción y depende de los gustos.

Debido a la cantidad de azúcares de la propia fresa más la que hemos añadido se conserva perfectamente en el frigorífico durante mucho tiempo pero también se puede pasteurizar al baño maría para ello, hay que introducir los botes cerrados con la mermelada  y hervirlos durante diez minutos. Seguidamente se introducen en agua fría.

Nosotros no lo hicimos, la verdad es que la mermelada nos dura muy poquito porque nos la comemos enseguida.

Como uno de los botes de mermelada era para regalo decidimos darle una presentación especial.

Primero envolvimos la tapa con un retal de flores rojas que teníamos en casa sobrante de otra manualidad, para que no se deshilachara y no tener que coser la cortamos con las tijeras de cocodrilo. La cerramos con rafia natural y roja también sobrante de los regalos de navidad.

Le colocamos unas etiquetas de papel kraft que hicimos con la taladradora y le pegamos a una un corazón con la inscripción "Strawberry Jam" y a la otra "Hand made with love". Esta dos etiquetas la descargamos  gratuitamente de la estupenda web www.eatdrinkchic.com

Por último le colocamos una fresa de fieltro comprada en un bazar chino y que una pequeña cucharita de madera que le da un toque muy chulo ¿no os parece?

Pues ya sabéis animaos a hacerla de fresas o de otra fruta porque ademas de pasar un rato divertido con los niños está muy buena y también es un detalle bonito para regalar.

A nosotros en otoño nos gusta mucho salir a coger castañas y hacer mermelada con ellas porque así la actividad es completa. ¡Pero primero tiene que pasar el ansiado verano y esa será otra historia!